Páginas

jueves, 19 de mayo de 2011

"China. Miradas cruzadas", once relatos para conocer al gigante asiático

China se postula hoy como firme candidata a potencia hegemónica mundial, pero son muchos los aspectos que aún se desconocen de la vida en el gigante asiático, un déficit que encuentra paliativo en los once relatos del cómic "China. Miradas cruzadas".

Recién editado por Diábolo, el libro ofrece una visión sin prejuicios de la sociedad china, pero también queda espacio para narraciones de corte histórico o meros cuentos en los que la fantasía se da la mano con elementos mitológicos.

La parte más atractiva de la obra radica en la unión de culturas bien alejadas entre sí, ya que seis de las historias pertenecen a jóvenes autores chinos como Zhang Xiao Yu, Gu Bao Xin o Yao Fei La, mientras que las cinco restantes corresponden a dibujantes franceses y belgas como Viravong, Anne Simon, Bandini o Saulne.

Los ilustradores europeos "fueron invitados a pasar diez días en China para presentar su visión", recuerda Nicolas Finet en el prólogo del libro. "Como punto de llegada se escogieron cuatro ciudades representativas de algunas de las múltiples facetas de la identidad china: Pekín, Shangai, Hong Kong y Chengdu", señala.

Cada autor dispuso de completa libertad a la hora de elegir su propia perspectiva: "No había más límite que la imaginación y la implicación individual: proponer mediante una ficción, y sin prejuicios, una visión de la vivido en China", añade Finet.

El resultado es una obra de lo más variada y atractiva, con una gran riqueza de estilos narrativos y gráficos, caracterizados además por las necesarias diferencias entre las formas creativas de dos continentes tan alejados el uno del otro.

Los lectores que se acerquen a "China. Miradas cruzadas" tendrán la oportunidad de deleitar sus sentidos con "El canto de las ranas", una obra de Zhang Xiao Yu basada en la novela homónima del escritor Qi Shuren. El relato nos muestra la realidad de un país que se divide entre el capitalismo salvaje y un pasado campesino que se encuentra al borde de la extinción.

Más curiosa es la historia que propone Viravong en "The King of Kowloon", donde narra la vida de Tsang Tsou-Choi, un hombre que en 1956 se autoproclamó monarca del barrio hongkonés de Kowloon. Para reclamar sus derechos, Tsou-Choi no dudó en plasmar su caligrafía en cada pared del vecindario, lo que en 2007, año de su muerte, le valió el reconocimiento de la comunidad grafitera internacional.

La denuncia social se abre paso en "Visado", de Sylvain Saulne, que muestra la visión de un extranjero respecto a la miseria que atenaza a buena parte de la población china.

En este relato, un joven occidental acude a un burdel, donde otra chica de su misma edad tiene que prostituirse para ahorrar el dinero que le permita abandonar el país y labrarse un futuro más esperanzador.

Son solo tres ejemplos de lo que este libro encierra en sus páginas, una perspectiva novedosa sobre una realidad desconocida. La iniciativa no es tan sorprendente, ya que "China. Miradas cruzadas" pertenece a una serie que ya contaba con otros dos títulos: "Japón" y "Corea", publicados ambos en España por Ponent Mon.

Fuente: efe

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Ratings and Recommendations by outbrain